30 de enero de 2006

Crónica de un secuestro anunciado (Primera Parte)

Pikachu sigue sin comer frostis de kelos y anoche le quité el vozka (que es de lo que se alimenta su espíritu). Estoy muy enfadada, mucho. Puede que un día de estos abrais esta bitácora y os encontreis con una sorpresa desagradable. Chicos, he descubierto el lado oscuro de la vida, y me gusta... Ni la mirada tierna de Pikachu va a conseguir resarcirme esta vez. Proclamo.

2 comentarios:

Pachu del Valle dijo...

Vale, si lo que quieres es una pingüe excusa para cargarte al bicho ese, por mí, destrípalo ya. Pero luego no vengas con aquello de "es que no me comentaba nadie." Y que conste que me he leído medio blog y, además, el bicho me la suda.
un beso.

Anónimo dijo...

Que sepas que he avisado a Greenpeace y al Seprona, pero estás teniendo suerte y me dicen que no lo tienen como especie protegida. Espero que al menos le digas que lo hemos intentado y no añadas a su desgracia un sufrimiento moral o por lo menos dale una onza de chocolate.

PD. ¿por qué no secuestras a Norris en vez de recrearte con lso más débiles?