30 de diciembre de 2006
26 de diciembre de 2006
Aportación fundamental a la paz mundial

12 de diciembre de 2006
Si te dicen que reí
Con el tiempo comencé a comprender los mensajes de las tiras: políticos, filosóficos e incluso vitales (era la época en que una, en plena efervescencia hormonal, necesitaba héroes y como nunca me gustó mucho Alejandro Sanz, pues me tiré al blanco y negro, con perdón).
Hace unos meses me regalaron un libraco enorme y verde con Todo Mafalda. Cada vez que lo veo hago como Homer Simpson cuando ve unas cervezas, es decir: "gggggrrrrgggrrrggrrr".
En todo este tiempo y en todo el trabajo de Quino hay una tira con la que sigo descojonándome en la plenitud más absoluta de mi ser (es que no encuentro palabras gggggrrrrgggrrrggrr):

11 de diciembre de 2006
Un buen día para celebrar los Derechos Humanos
A falta de que la justicia de los hombres sea perfecta, tenemos la justicia natural que, ayer, sin miramientos del grado militar, se ha llevado a un sanguinario dictador...
5 de diciembre de 2006
Sin puente, sin nieve o todo lo contrario

30 de noviembre de 2006
Diario de una festivalera incipiente (Día 5, 6 y 7) Gijón de cabo a rabo y tiro porque me toca

28 de noviembre de 2006
Diario de una festivalera incipiente (Día 4) La línea recta, la peli larga

27 de noviembre de 2006
Diario de una festivalera incipiente (Día 3) De resistencias, terromotos y otras adversidades

Después de "Resistencia" fuimos a ver "Shortbus". ¡Ay, mamina!, ahí si que me sentí yo como una pueblerina cualquiera. La película ta rodá en Nueva York y los protagonistas pasense la vida fornicando entre ellos, como si tal cosa. Con decir que la actriz principal se pasa hora y media buscando un orgasmo vos lo digo tó. Al final tengo que reconocer que me gustó el asuntu. Ye exótico eso de ir los bares a fornicar. Como en Sama a lo máximo que aspiramos ye a que te echen bien los culetes...
Por último acudimos a la Sala Acapulco a ver a la Terremoto de Alcorcón. Eso sí que ye arte y no el cine independiente. Reíme muchísimo y compartí un cigarru con la artista. Algo que no lo puede decir una todos los días.
26 de noviembre de 2006
Diario de una festivalera incipiente (Día 2) Nº 2 y dolor de muelas

25 de noviembre de 2006
Diario de una festivalera incipiente (Día 1)

PD: Ésta semana de disfrute megatrónico es la respuesta a la reivindicación que, hace meses, proclamé en esta bitácora de mis entretelas.
18 de noviembre de 2006
Realidad y/o Ficción

La elección del papel que representaras a la hora de jugar a las series en el Molinu era importantísimo y de él dependía que estuvieras media tarde encerrada en casa porque «los lagartos no te pueden pillar ya que eres la salvación de la raza humana» –que se lo pregunten a Mariquina. O que te pasases media mañana eludiendo los piedrazos de los invasores lagartos, que me lo digan a mi.
Si la serie a emular era «Corrupción en Miami» la cosa cambiaba. La pregunta no era ¿Quién quieres ser?, más bien la custión se encuadraba en: ¿Cómo te vas a vestir?. En el Molinu, el juego de la famosa serie de Don Johnson consistía, simplemente, en lanzarte al río vestido como si las heladas aguas de un riachuelo llanisco fuesen igual que las de una piscina de Florida.
Con el paso de los años no dejamos de jugar a la ficción, simplemente cambiamos de género y nos pasamos al cine. Como Juanma era el mayor, y además era «Dayana», él era el encargado de elegir el título a representar. Durante largos meses preparamos, en la cuadra de mi tío Daniel, el estreno de «Tacones Lejanos». Juanma era Marisa Paredes, Victoria Abril y Miguel Bosé, todos a la vez. Mariquina era Miriam Díaz Aroca y yo era la doble de los tres personajes de Juanma cuando coincidían dos en un mismo plano. Aún recuerdo el número musical de mi primo: «y entenderásssss....en un solo momento....qué significa....un año de amorrrr, qué significaaaa...un año de amor». Él cantaba y cuando Marisa Paredes se agachaba a besar las tablas del teatro era yo la que entraba en escena, como doble de Juanma, y besaba el suelo de la cuadra. ¡Qué tiempos!
16 de noviembre de 2006
Poema infantil de la duda

dudo si comer una pera o esa manzana,
dudo cuando busco algo con qué entretenerme en el sofá de casa
dudo cuando sueño
¿color o blanco y negro?.
Dudo si Argentina o Guatemala,
dudo si Gabriel o Benedetti,
si Mendoza o Galeano,
si Sabina o Amalia.
Dudo cuando suena el despertador
dudo en la lista de la compra,
en la marca de cerveza,
a la hora de escoger una talla.
Dudo de todo lo que no es nada.
No dudo de mi,
no dudo de ti
y por ahora me basta.
7 de noviembre de 2006
La Alfombra de Contar y otras libretas

- Enero de 2003. Línea 6 de metro Moncloa-Ciudad Universitaria: Rosa tiene sesenta años. No es de aquí, su acento la delata, es del sur. Conoció a su marido, Pedro, en las fiestas del pueblo. Se enamoraron una tarde de verano entre guirnaldas y pasodobles. Ella lo cuenta siempre que puede, lo está contando ahora. Lleva 31 años ... (Próxima parada Ciudad Universitaria....)
- Marzo de 1997, libreta pequeña y azul: El metro de París sí es como el de las películas...
- Noviembre de 2000. Clase de Historia de la Representación Escénica: En 1973 la obra "El Avaro" ocupaba el segundo puesto en cuanto a número de representaciones dramáticas en la Comedia Francesa, únicamente superada por "El Tartufo".
- Abril de 2005. Libreta de tapas floridas y papel amarillento: "En una esquina de la clase de educación infantil los niños se reúnen a escuchar los cuentos que leen sus profesores. Ellos, los pequeños que apenas levantan un palmo del suelo, le han puesto al lugar un nombre tan poético como La Alfombra de Contar.
- Octubre, 27, 2003. Papel doblado en libreta verde: Querida Aitana, como te prometí, te adjunto las dos estampas de mi tan venerado y amado Cristo de Medinaceli.
- Septiembre de 2005. Avión con destino a Guatemala. Libreta verde:
- 30-9 "Hoy las niñas del colegio belga tocan, en clase de música, la canción "Yesterday". La portería de la escuela, que da a la Avenida 10, tiene un mostrado de madera negra y unos techos altísimos".
- 1-10"El cielo está gris, pero hoy, desde que me levanté ya ha estado violeta y azul".
- 4-10 "Las calles, los caminos, las caleyas o cualquier suerte de lugar por el que tengas que andar en este país, siempre están llenos de gente y de muchos niños".
- 9-10 "La situación en el país es de auténtica catástrofe...carreteras cortadas, pueblos enteros devastados y mucha necesidad entre los supervivientes".
- 14-10 "Guatemala amaneció el lunes con un sol radiante, por primera vez en ocho días los guatemaltecos veían algo de luz después de la lluvia. Y nosotros también.
- Ayer mismo, libreta roja de trabajar: "O no entiendo lo que ha pasado o ya ha pasado lo que yo estaba entendiendo" -Carlos Monsivais, escritor mexicano-
¡¡¡Cae de cajón....hombre por el amor de dos!!!!


¿Cómo pudo saber Kant qué hora era exactamente?
PD: Conste que sé la respuesta porque en casa de mi güela tuvimos, durante años, un juego de lógica que incluía éste y otros enigmas matemáticos que nos trajeron por el camino de la amargura muchas tardes de noviembre y muchos kilos de nueces...
31 de octubre de 2006
Habemus Purrusal2

El otro día caminando por el extremo más occidental de Asturias: la localidad coruñesa de Betanzos (y eso lo digo yo que hoy me levanté nacionalista) encontré la pintada que aparece en la foto. Me acordé, entonces, de que había escrito, en esta bitácora de mis entretela, la despedida del coche con el que caminé durante dos largos años por este valle de lágrimas. El "Purrusaldo" -así era conocido por propios y extraños el Renault 19 que me vió nacer como conductora- se marchó con un recalentamiento en las válvulas diódicas (lo he inventado pero a que queda genial). El caso es que no os mantuve al tanto de mi nueva adquisición, el Purrusal2. Un Renault Clio, azulito, seminuevo, con radio en la que se pueden escuchar cedeses y ¡dirección asistida!. Creo que para mantener los robustos brazos que había conseguido desarrollar gracias al Purrusaldo original, voy tener que apuntame a un gimnasio. He dicho.
23 de octubre de 2006
De PP Blanco, fines de semana trabajados y demás penurias

A) Soy una becaria de tres al cuarto que cobró por esperar hasta que usía hablara, a las once y media de la noche, lo mismo que si nos hubiera dicho una frase (sólo una) a las diez, cuando llegó.
B) Cobré por ese día lo mismo que usía se gasta en el postre de la cena.
C) Soy mileurista pero sólo algún mes, otros ni siquiera llego a tamaño despropósito salarial, así que no me haga comentarle nada de tema vivienda, tema trabajo y ése largo etcétera existente en la vida de una veinteañera como yo.
y D) ¿Y usted? sabe diferenciar lo que es un puñetazo en la cara de una patada en sus partes (Es que me dio una rabia agresiva que no os podéis imaginar)».
No se lo dije a él pero se lo comenté a su jefe de prensa cuando se me acercó en su papel de «en el PSOE somos progresistas y entendemos las preocupaciones del mundo mundial» a pedirme «perdón» por....no sé. (Lo de la agresión no sé lo dije por.....no sé)
18 de octubre de 2006
5 de octubre de 2006
En busca de Purrusaldo II
28 de septiembre de 2006
Si me necesitas sílbame...
Claude Rains (Capt. Renault): "¿Por qué demonios vino a Casablanca?"
Humphrey Bogart (Rick): "Al parecer me informaron mal"
21 de septiembre de 2006
El maestro de escuela
"En un lugar de la Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor...”
Don Antonio siempre empezaba abril con la lectura del Quijote. Él sabía que aquellos chicos a los que daba clase en la escuela perdida del sur de Argentina, al sur de todo, nunca conocerían España, ni la Mancha, ni los molinos que su abuelo recordaba en la línea del Horizonte. Ni siquiera él mismo los conocía. Don Antonio nació en Buenos Aires. Creció como pudo entre las máquinas de escribir de la notaría que regentaba su familia y las calles de una ciudad que era las suya, pero no lo era. Porque a él, y a su hermano Alonso, los niños del barrio siempre les llamaban gallegos.
Cada abril que Don Antonio iniciaba la lectura del Quijote, se acordaba del poeta Rafael Alberti, quién sabe por qué. “Ha venido Rafael” decía su padre, “ya llegó el comunista”, añadía su madre con aire de desdén más porteño que otra cosa.
Si venía Rafael, si venía cualquier otro de aquella España lejana que el pequeño Antonio no conocía, su padre los llevaba a la Casa de Asturias. Reunidos en el gran salón del segundo piso todos parecían nostálgicos, llorosos, quizás porque no siempre traían buenas noticias del Norte. Alonso y Antonio se sorprendían del acento rudo y plano que tenían los invitados, muy parecido al del abuelo y al de Gerardo, el panadero riojano que había aparecido en la puerta de su casa un invierno con los pies empapados y el rostro desencajado. Gerardo murió meses después. La abuela decía que de gripe. El abuelo añadía siempre en bajito: "... y de pena".
11 de septiembre de 2006
Frases Célebres de andar por casa
El electroimán, como la Tierra, tiene dos polos que se llaman Norte y Sur igual que se podían haber llamado Epi y Blas. (Chema de Barrio Sésamo).
No “transgiverses” las cosas. (Pa qué nos vamos a complicar ...)
¿Eres de aquí o vienes a la fiesta? (Ya no es lo típico de ¿Estudias o trabajas?)
Pues a mi el Papa ni me cae bien ni me cae mal, como no lo conozco... (Cristiana practicante).
Ahora pasaré a "endosar" las listas del paro. (Vecina pesimista)
En Asturias no hay “respectivas” de futuro. (Vecina pesimista, de nuevo)
Soy muy “forofofo” del Barça. (Forofa).
C.E.D.A. : Confederación Europea de Democracias Administrativas. (Empollona).
"Y vivió... hasta que murió" (Apocalíptica).
Sumar es una gran masa de agua salada. (Licenciado en Ciencias Exactas)
La Ilíada relata el homenaje a Patrolo, Homero actuó como cronista deportivo. (Literato)
Los antiglobalizadores no estamos locos, sabemos lo que queremos, vivir la vida igual que si fuera un sueño. (Antiglobalizador flamenco).
No piensen ustedes que van a servirle al mundo para algo. (Profesora optimista)
Esta puerta esta mal, hay que echarle "tres en raya". (Ahí estamos! y despues un parchis...)
10 de septiembre de 2006
28 de agosto de 2006
(Peligro: autobombo) Cumpleaños en Sairutsa

18 de agosto de 2006
La Virgen del Carbayu y yo

Me llaman de la Sociedad de Festejos de la Virgen del Carbayu. Me dicen: «¿Cómo no nos escribes algo para el porfolio?» (Para los foráneos: el porfolio viene a ser un documento más bien rancio y friki en el que se recogen fotografías pixeladas cuando no borrosas o mal cortadas (veáse la que ilustra estas líneas) y la gente escribe poesías del tipo "Virgen del Carbayu, Virgen del Carbayu, cuando te veo me pongo babayu...". El libro, como no, es leído con dedicación y alevosía por los abuelos y abuelas de Langreo). Total, que dije sí, y escribí una reseña titulada «La Virgen del Carbayu y yo». No la expongo en estas líneas porque bastante tengo yo con lo mío, pero desde aquí os lo digo, de este primer paso que he dado a escribir una poesía como la anteriormente citada hay una delgada línea. Creo que necesito un poco de modernez para salir de este momento cañí de la cuenca en el que estoy metida desde hace unos años......
¡¡¡VIVA LA VIRGEN DEL CARBAYU!!!
6 de agosto de 2006
Capítulo II: Roma y sus cien mil secretos

En los tres días que vivimos como romanos, visitamos Plaza de España, discutimos con un tío que se empeñaba en tirar las cervezas, compramos postales, probamos una cerveza con sabor a salmón ahumado, escuchamos alabanzas hacia ZP y la ciudad de Barcelona, confirmamos que los italianos se pirran por las vespas y prefieren conducir a velocidades extremas antes que frenar por un semáforo en rojo; observamos con perplejidad el precio de una chaqueta expuesta en el escaparate de Versace, escuchamos un millón de acentos -algunos imposibles-, bebimos agua de casi todas las fuentes y al final nos compramos un billete con destino al norte que nos dejó en Florencia.
Y si Roma es una ciudad de secretos, Florencia es un muestrario de lo que fuimos (tal vez de lo que seremos) nosotros los que con orgullo indolente nos hacemos llamar ¨ciudadanos de occidente"...
Continuará
3 de agosto de 2006
Capítulo 1: Uno, due, tre...tutti!!!!

La luz de Roma se transforma, a media tarde, en un sol eterno que baña de sombras sus ruinas. Sombras y ruinas se conforman como un todo que te lleva.Y tú, pues te dejas llevar. El calor y el sudor que recorre el cuerpo te confirma que eres humano cuando te sientas en las escaleras de Plaza de España, divisas desde lo alto el barrio del Trastevere o tomas una cerveza junto al Coliseo. Si no fuera por ellos, tal vez soñaras parecerte a las estatuas de deidades que pueblan la gran ciudad. Dos días caminando por sus calles para darte cuenta de que todos los caminos llevan a Roma y todas las almas estamos predestinadas a encontrar en algún rincón romano el secreto de nuestro pasado, de nuestra existencia..
16 de julio de 2006
Cronosopías del «Hip-hop»
4 de julio de 2006
Italiano para principiantes

Miro al norte, que para los habitantes de Sairutsa es como mirar hacia delante, y veo Italia. Siempre pensé en ella como el país más grande sobre la faz de la tierra. Y creo que eso se debe a que un poco de las calles de Roma, del olor de Florencia y de la luz de la Toscana habita en todos los que la han visto o soñamos con verla algún día. Los viajeros podemos contemplar las ruinas del tiempo y de la historia y sentirnos cómplices de unos hombres que eran dioses, de una civilización que convirtió las deidades en piedras impermeables al paso del tiempo...Cuento las horas...
29 de junio de 2006
Mundiales Contradicciones
15 de junio de 2006
5 de junio de 2006
Era en junio, el tiempo que declina...
26 de mayo de 2006
La Mascota de Sairutsa

Siempre quise tener un llobín...os presento a Sófocles. Cuidao que tien carácter, como la dueña. Ya lo dice mi tiu Daniel: «No hay animal de rabu que no se parezca al amu».
21 de mayo de 2006
España no se acaba donde empieza el mar....hay barca pa seguir

El pasado domingo y por uno de esos gajes –llámale gajes llámale putadas– del trabajo, hube de asistir a una jura de bandera civil que unos cuantos (¡¡¡120!!!) organizaron en La Felguera para demostrar su:
a) amor al Rey –alguno me confesó que su amor iba más encaminado a Franco.
b) lealtad a la bandera de España –derramarán su sangre en caso de guerra, allá ellos...
c) compromiso con la Constitución –los del apartado a) no tenía muy claro este punto c)
He aquí el fragmento de una conversación de la que fui protagonista involuntaria –llámale involuntaria, llámale perpleja–.
–¡Niña, niña! –aunque no lo parezca me llamaba a mí.
–Dígame señora -respondí.
–¿Pa qué periódico trabajas?
–Para La Nueva España (con perdón)
–Me llamo María de los Ángeles Vigil-Escalera Sánchez Albornoz Gutiérrez. Y tienes que poner ahí – en la libreta– que Melilla y Ceuta tienen que ser españolas.
–Pero Melilla y Ceuta ya son españolas –respondí tras una breve pausa en la que hube de reflexionar si el gobierno de ZP que por lo visto «desmembralaunidaddeEspaña» había cedido «nuestras colonias africanas».
–¡Ah, vale! Pues pon ahí que el peñón es nuestro.
–(En este punto de la conversación simulé que escribía)
–¡Niña, niña!
–Dígame señora
–Y pon ahí que yo soy felguerina, asturiana y española. Si esto que te estoy diciéndo es muy largo pon que yo soy ESPAÑA.
–Vale
–¡¡¡¡¡¡¡Vi-va-Es-Pa–Ña!!!!!!!!!
–(Coro de amigas de María de los Ángeles Vigil-Escalera Sánchez Albornoz Gutiérrez (o lo que es lo mismo España) Vi-Va (dígase esta alocución con énfasis en la separación
Un concejal leal del PP tenía lágrimas en los ojos (alegó tener conjuntivitis ). Y un columnista histriónico del periódico antes mencionado ganó puntos para que servidora le dejase de hablar del todito. Lo mismo hoy me da y me tiro al monte. ¡Vi-Va YO!
11 de mayo de 2006
De planes y colores
3 de mayo de 2006
Cuaderno de Bitácora: De sábados, olores y papeles escritos

En la Baixada de Llibretería hay una tienda que recoge, en poco más de cinco metros cuadrados, toda clase de plumas estilográficas, libretas y tintas. Su interior huele a papel y la fachada recuerda a las tiendas de antiguo. Nadie puede llegar a imaginar, sino se adentra en ella, que dentro de esas cuatro paredes se albergan miles de hojas en blanco a la espera de ser entintadas con letras y cartas de amor, manifiestos humanos, listas de buenos propósitos (o de la compra que al final parece ser lo mismo), cuadernos de bitácoras, «haikus», versos.... Los objetos de «Papirvm», que así se llama la tienda, recorren el mundo. Gracias, en buena parte a que la Baixada de Llibretería se encuentra en la zona turística de la ciudad. Fuera de la tienda se respira un fuerte y adorable olor a café.
En la librería Tartessos, de la calle Canuda, hay cientos de libros apilados en estanterías. Entre todos ellos encontré un cuaderno de Chejóv cuyo subtítulo reza «Cómo hacer un reportaje». No creo que vaya yo a hacer artículos sobre Rusia al estilo del escritor, pero tal vez sus reflexiones me sirvan para afrontar el día a día de este trabajo en el que debes buscar, a cada rato, la curiosidad para no perder la conciencia (o la consciencia). Es sábado y la gente camina sin descanso por estas calles de la ciudad vieja. Por la izquierda se oye la música de una orquesta. Tocan, creo, una marcha nupcial. Y por la derecha llegan los sonidos inclasificables de la Rambla de las Flores. Hace sol y sobre mis rodillas reposa lo que parece ser un buen libro. Tal vez Barcelona sea todo esto.
2 de mayo de 2006
Cuaderno de Bitácora: Malevich, incendios y otros colores

Malevich nos enseñó que también la nada puede ser arte y un incendio en la cocina del bar donde comíamos que el churrasco, en Barcelona, te lo hacen muy pasado. La terraza de Juanma nos indicó el camino para ver otras terrazas mucho más conocidas. El Barrio Chino, al que ahora se conoce como Raval, fue el encargado de mostrarnos cómo el turismo puede cambiar la forma, el fondo y hasta el nombre de un barrio. Otro bar (que no quemó pero en donde nos tuvimos que resguardar de la lluvia mediterránea) nos expuso los inconvenientes de las gotas de agua imprevisibles e inconstantes del Este. Una pizzería con miles de pegatinas nos indicó que no todo en Barcelona está diseñado por Jordi Labanda (o tal vez si). En las calles infectadas de turistas descubrimos que no hace falta saber catalán para vivir allí, hay que saber inglés. El techo en el que la luz de las calles dibujaba extrañas curvas nos remitió nuevamente a Malevich y su nihilismo, gracias, sobretodo a una simple franja amarilla.
25 de abril de 2006
«De pernas pro ar»

«Hace ciento treinta años, después de visitar el país de las maravillas, Alicia se metió en un espejo para descubrir el mundo al revés. Si Alicia renaciera en nuestros días, no necesitaría atravesar ningún espejo: le bastaría con asomarse a la ventana...»
Eduardo Galeano
22 de abril de 2006
Mi primavera

Nunca creí en la primavera hasta que descubrí moho en los cajones donde guardaba mis cartas de amor. Ahora me gusta disfrutar de las mañanas azules y aspiro el aire cuando voy a levantarme, justo antes de abrir los ojos y ver...el sol.En primavera miro y pregunto como los niños: qué, para qué, por qué, cuándo y sobretodo quién...Y luego, como los niños, me quedo pensativa, discutiéndome internamente la curiosidad que me entra por primavera. Hago lo que normalmente no hacemos cuando sólo nos preocupamos por vivir
18 de abril de 2006
10 de abril de 2006
9 de abril de 2006
Purrus & Salda

Os presento un nuevo cómic, su nombre: Purrus & Salda. Protagonizado por Purrus y Salda.Para compartir con todos vosotros este «jobi» de dibujar tiras cómicas, aquí sus dejo el enlace del que surgió este futuro hito de las viñetas: www.stripgenerator.com
30 de marzo de 2006
Poemas de/para otros

Ella quiso ser pirata de una isla del caribe
Él coronel de barco que buscaba en sus cabellos el timón.
Ella cabaretera en Bostón, con el humo de la noche golpeándole los ojos,
él trashumante que busca, en el mundo, otros horizontes.
Ella fue doncella sin quererlo,
él escribano de reyes de cuento.
Ella fue alondra y fue huerto,
él fue virtud y matasellos.
Ella quiso ser parisina en el café de Los Griegos,
él autor en busca de musa y la encontró en el puerto.
Él y ella se conocierton recitando estos versos...
y fueron todo aquello que alcanzaron con sus besos...
15 de marzo de 2006
La muerte de Milosevic

Me enteré de la muerte de Milosevic en una de esas introspecciones furtivas que hago cada tarde en internet mientras espero que me surgan las palabras oportunas para contar este valle que vivimos.
Supe de la existencia del dictador serbio hace muchos años, cuando surgió el conflicto de Los Balcanes, y mi madre se encargó, junto a otras mujeres, de recoger alimentos y ropa para enviar a Bosnia. Entonces el nombre de Slobodan Milosevic se me antojaba lejano. Tanto como los tres mil kilómetros que nos separan de la Antigua Yugoslavia. Con el tiempo, supongo que con la edad, y con mi interrelación con diferentes personajes relacionados con ese país eslavo fuí escribiéndome un perfil más próximo de él. Conocí a María Palacios en la Facultad. Ella había vivido en Belgrado hasta los 18 años, cuando los bombardeos de la OTAN hicieron de Serbia y su circunstancia otro foco de indigencia moral occidental. Las palabras y explicaciones de Palacios sobre el nacionalismo serbio no hicieron cambiar mi opinión preconcebida sobre la crueldad de los pensamientos dictatoriales sean del calibre o la tendencia que sean. Tampoco sirvieron las charlas con sus amigos o un trabajo que hicimos para la «Cátedra UNESCO» titulado «Los nacionalismos en la Guerra del Este». Cinco años después de conocer a María, viajé a Bosnia-Herzegobina. A la zona de Goratze, en la frontera con Serbia. Donde el ejército comandado por Milosevic había cometido tantos asesinatos, violaciones y delitos que en aquel momento –diez años después de todo– los bosnios no tenían ganas de contarlo, tampoco de olvidarlo, ni yo estaba convencida de que necesitara saberlo.
Ha muerto Milosevic, como primero lo hicieron sus dos fieles escuderos Tudjman e Izetbegovic, dejando tras de sí la estela de demasiadas tumbas en los caminos balcánicos y una tristeza doliente en los ojos de Enisa que aún no pude olvidar.
11 de marzo de 2006
Correspondencias

«Los correos electrónicos y mensajes de móvil son una estrategia para la evitación, para mantener al otro a una distancia de seguridad. A nuestro alcance pero no a nuestro lado», dijo cierto día Jiménez Burillo –profesor de Psicología Social de la Universidad Juan Carlos I de Madrid–. Al leerle pensé que quizás estos medios sean una herramienta para enseñar a los demás aspectos de nuestro yo que de otra manera y en el mundo real no podríamos, no querríamos o no sabríamos revelar. Por medio de estos medios (valga la «abundancia») mostramos nuestro lado más fotogénico, más sexy, más humano, más huraño, más falso o también, por qué no, el más verdadero. A mi me gusta utilizar esta clase de filamentos informáticos para expresarme, entre otras cosas porque creo que pierdo en las distancias cortas. Pero me gusta apostar, perder y levantarme de la timba cuando ya estoy desnuda....
9 de marzo de 2006
Juegos de palabras

De pequeña pensaba que un palíndromo era un oso, que una anáfora era una hoja verde que flotaba sobre el agua de un estanque, y un lipograma cualquier suerte de toxina que no nos dejaba adelgazar. (Sin risas que mi hermana creía que El Ecuador era un país muy delgado pero muy largo que daba la vuelta al mundo).
1 de marzo de 2006
27 de febrero de 2006
Llama-radas
16 de febrero de 2006
(Cadáver exquisito): Paso fronterizo

14 de febrero de 2006
Nuevas historias de Castilla la Vieja (y III)

Con el lunes madrileño se despertaron las sirenas y los atascos de la gran ciudad. Caminamos Cea Bermúdez abajo hasta la Fundación Jimenez Díaz. Rodeamos el Museo de América, levantamos nuestra mirada ante el inmenso Faro Moncloa, y nos escondimos entre las carpetas estudiantiles de Ciudad Universitaria. Durante mis cinco años en Madrid nunca ví un sol tan maravilloso como el de la Avenida Complutense por las mañanas, en la fresca. A la clínica donde yo trabajaba venía una mujer brasileña: Berta Silche (de la que ya cogí el nombre para varios relatos). Silche solía decirme que cuando pasaba en coche junto a la parada de metro de Ciudad Universitaria tenía la tentación de dejarlo todo, bajarse del coche, y buscar entre los árboles pérdidos de la zona a un antiguo novio de la facultad. «Era muy guapo» me decía mientras comía un poco de pan –siempre comía pan–. No digo que a nosotros nos pasara lo mismo. Pero sí que se intuía en nuestros ademanes una nostalgia sutil, casi diáfana. Nostalgia, morriña o señalda. ¡Vete tú a saber lo que sentí yo al hablar con Pinar y Elena, al ver a los mismos camareros en la cafetería, al recorrer los suelos llenos de papeles de periódicos (caprichoso destino), al confirmar que el mundo cambia en mi ausencia (Como había cambiado todo cuando dejé Madrid y volví) al darme cuenta también que siempre hay algo que permanece, aunque sea un simple rayo de sol mañanero.
13 de febrero de 2006
Nuevas historias de Castilla la Vieja (II)

La segunda jornada en tierras de la Villa y Corte amaneció con una tostada y un café en la calle Cea Bermúdez. Nuestro objetivo era «pasear el Rastro» y redescubrir la idiosincrasia madrileña con un par de cañas (llámale par, llámale quinteto). En el mercadillo más famoso de todos los tiempos no compramos nada. Yo hubiera gastado mis ahorros pero tenía el día estoico y me conformé con un paseo «en blanco» por el barrio viejo-nuevo de Lavapiés. En la taberna Don Antonio descubrimos que los pimientos del padrón unos pican y otros non (la pólvora, vamos) y que en un bar desolado de la Plaza la Cebada puedes quedarte sin espacio para respirar en menos de lo que Juan (el camarero) sirve «cinco cañitas y algo para empujarlas». Después de comer y arreglar parte de nuestro ideario político-social proseguimos con nuestra visita cultureta y entramos en los salones amarillos y grandiosos del Museo del Prado. El Greco, Zurbarán, Velázquez, Goya, Botticceli...Y grandes obras maestras de la historia mundial de la pintura universal, somos así de gallos. Nos quedamos con la visión magnífica del tríptico «El jardín de las delicias» de El Bosco. «Dalí no inventó nada» acerté a oir cerquina de mi oreja izquierda a los cinco minutos, perdida como estaba entre el rimero de dibujinos que el flamenco, en su paranoia, dejó expuestos en el gran cuadro. A mi alrededor, y con la misma mirada deslumbrada unos cuantos holandeses proferían en su idioma susurros indescifrables que debían significar algo así como: «¿qué cojones harán estos españoles con tanto cuadro de Flandes?». Se siente señores nórdicos, España es asín. Nuestros días de gloria histórica condujeron a muchos pueblos a la perdición (veáse capítulo del Descubrimiento de América en términos indígenas). Pero la perdición de esa gloria supuso para la nación española los mayores éxitos artísticos de la Edad Moderna. Algo bueno tendría que haber. Tres horas en «la mejor pinacoteca del mundo» nos llevó a otra suerte de museo no menos importante: el de las personas que admiramos. Una conversación fluída en la que, al final, lo importante no son las palabras sino los sentimientos que te sobrevienen al pensar en ellas; y un poco de cava con limón, se conformaron como los complementos perfectos para una última visión nocturna de la Gran Vía. Y a dormir que mañana es otro día.
9 de febrero de 2006
Nuevas historias de Castilla la Vieja (I)

Castilla se abrió ante nuestros ojos como el campo grande y colorido que es. El hielo que había caído aquella noche, le daba al paisaje un halo diáfano de misterio y luz. El Alsa, esa empresa del transporte mundial que tanto nos ha dado a los estudiantes asturianos que vivimos nuestros días de vino y gloria (o no) en la Villa y Corte, siempre te ofrece un camino castellano lleno de imágenes sorprendentes donde el ser humano, o sus fragonetas (un guiño para la cheli), son los protagonistas. Madrid nos esperó, como siempre, más al sur. Allí siguen las mismas caras y también muchas ausencias (sobretodo la de Marta, que disfruta como nadie de la sociedad «occidental»). Volví a la capital desde este norte frío y somnoliento, sabiendo que no pisaba territorio extraño y descubrí que las ciudades, al igual que muchas personas, se disfrutan cuando las recorres con los ojos de la experiencia compartida y esperándo que en una esquina, una calle, un atardecer o una caricia, te puedan sorprender. La primera tarde que recorrimos las calles madrileñas se nos hizo de noche en el círculo de Bellas Artes. Allí, disfrutamos de una suerte de exposiciones artísticas que nos llevaron desde la Caracas urbana y conflictiva del «23 de enero» ; hasta las profundidades de una naturaleza que nunca nos dejará de sorprender, pasándo por el desorden del orden de Joâo Tabarra y las Latitudes in-actuales del artista visual Jesús Pastor. Con la luminosidad violácea que sólo tiene Madrid, entramos en La Fábrica (www.lafabrica.com). Después, nos tomamos unas cañas, que no sólo de cultura vive la humanidad....
3 de febrero de 2006
Una de cal y otra de arena

Y la de arena:

Ha cerrado Frikipedia, ese gran caudal de información graciosa. El mensaje de los administradores reza así: «Amigos de la Frikipedia: Nos vemos obligados a cerrar por motivos legales. Pero antes, doy las gracias a (casi) todas las personas anónimas que han colaborado con la web. Probablemente no volvamos a abrir, por lo que, por si acaso, ¡Gracias, y hasta siempre! Los administradores». Snif... (Yo ya echo en falta a Chuk Norris...)
PD: Este fin de semana nos vamos para el sur...
2 de febrero de 2006
El fin de un cautiverio

1 de febrero de 2006
They all say «I love you pikachu» but....

El adorable Pikachu, el simpático Pikachu, el Pikachu con carita de heidi y rayos por los ojos, el Pikachu Popy (uh uh uh uh), el Pikachu esponjoso y tierno que vosotros defendeis es un chungu de la leche.... Por favor